Básicamente si, es una adaptación (parodia) de ella creada por Scott Adams.
Y ahora se preguntaran ¿quién es Scott Adams?
Es el creador del comic Dilbert, que cuenta las vivencias de un grupo de oficinistas.
Y pasamos a la pirámide:
Para motivar a tus subordinados debes mantenerlos motivados (contentos) con la siguiente jerarquía de necesidades:
La primera necesidad la satisfaces con comida, eso hará que tus subordinados estén con energías para poder trabajar. El elemento más importante es el café debido a su bajo costo y facil preparacion. Hay que hacer hincapie que el chicharrón es el alimento que más ensucia, se recomiendan las galletas para mantener la limpieza de la oficina.
La segunda necesidad a satisfacer es mediante una meta que los subordinados consideran importante y novedoso; pero que en realidad es el mismo proceso. Acá influye mucho la capacidad del líder para engatusar a sus colaboradores.
Al satisfacer la segunda necesidad se llega a la sensación de empoderamiento, que no es más que un poder suficiente para que los colaboradores sientan satisfacción laboral para que se esfuercen en producir mejor.
En el reconocimiento entra el líder para dar la retroalimentación suficiente para que sigan trabajando de manera óptima; pero lo insuficiente para que no pidan más de lo que el jefe desea dar. Es el típico espaldarazo que te da el jefe cuando haz hecho bien tu trabajo.
Nunca tanto |
La falsa esperanza de ascenso es la penúltima etapa en la jerarquía del oficinista, es el deseo de poder desarrollarte laboral y profesionalmente. Pero no se va a dar y solo queda en deseo.
El colaborador al darse cuenta que no llega al ascenso puede pasar a la ultima etapa que es querer más dinero, pero en el sentido de seguir trabajando, no mediante un aumento porque sabe que no le van a dar uno ni lo van a ascender.
Para finalizar dejo una caricatura del posible líder o jefe que pueda utilizar esta jerarquía.